LA CONTAMINACIÓN ACÚSTICA

La contaminación acústica es una forma invisible de contaminación ambiental – pero claramente audible muy común en nuestro medio.

Si caminamos por las calles de El Carmen o cualquier lugar del país nos encontramos con vehículos que no tienen tubo de escape, altoparlantes ubicados en plena vía pública, pitos y sirenas mal utilizados. Hay al parecer, un claro atentado contra la salud de los demás.
Cualquiera pensaría que eleva el volumen del aparato de música no afecta a nadie. Pero no es cierto, quienes se exponen con frecuencia a ruidos altos sufren una pérdida progresiva de la audición.

Las consecuencias generales y calculables que puede tener el ruido intenso en el ser humano son múltiples-y afectan a los sistemas vegetativos y neuroendocrinos. Sin embargo aseguran los expertos, estos efectos fisiológicos son menos importantes que las consecuencias del ruido. Si es cierto que el ruido irrita es cada vez más un agente contaminante de nuestro ambiente, afortunadamente la tecnología moderna, una de las principales causas del problema, cuenta con los medios de disminuir su producción, propagación y consecuencia en el hombre.

En nuestro medio no se hace nada por disminuir, más bien la falta de atención de las autoridades parece aumentarlo. Es necesario que las industrias y los comerciantes tomen como norma la reducción de ruidos y el control de la contaminación acústica para ayudar en la preservación del medio ambiente.